¿Os pregunto alguna vez habéis tenido necesidad de emocionaros? Ya sabemos que somos cuerpo, mente y alma, sin embargo, lo sabemos es así….
¿Damos la importancia que verdaderamente tienen? Si damos ese valor exacto a nuestras emociones,
¿Por qué se producen tantos MIEDOS, Y SITUACIONES ANOMALAS en nuestra vida trastornos,estress,ansiedad,depresiones?
Una parte de cada uno de nosotros está pidiendo una llamada de atención, pero sin duda nos auto saboteamos silenciándolo plácidamente y con el mayor descaro….
Habitualmente nos imponen qué debemos decir, qué debemos pensar y qué debemos sentir, hablando de esas emociones como si fueran mejores o peores
Apenas prestamos atención a nuestras emociones…..
Y tenemos esa falta de vulnerabilidad cada uno de nosotros nos encontramos en una sociedad instantánea. Te imponen que consigamos las cosas de manera fácil, simple y sin el menor esfuerzo para hacerlas excelentes,. La sociedad de la prisa a todas partes, y hacia ninguna no teniendo ni un solo momento para detenernos a pensar hacia donde nos dirigimos. La tendencia a vivir deprisa apenas deja tiempo para la reflexión, pero lo aceptamos porque es muy incómodo quedarse a solas consigo mismo.
«Esa vulnerabilidad es demasiado incómoda no te parece que nos hace más débiles, menos humanos».
Nuestra empatía se pierde, somos sociales, por ley y por decreto sin embargo, nos sentimos más solos que nunca. Lo tenemos que ver con las redes sociales y el uso excesivo en internet ,demasiada información sin lógica y sentido.
y te pregunto porque sucede esto?
Somos superficiales con nuestras relaciones. El modo en el que nos relacionamos es opuesto a la vulnerabilidad. La superficialidad genera falta de empatía. Vivir en esta comunidad requiere ser empáticos preocuparnos de los demás de forma asertiva y elegante.
Cuando no eres capaz de mostrarte a otros como verdaderamente eres, algo falla. El error reside es que tenemos un falso concepto de nosotros mismos.
Pregúntate ¿Existe la verdadera vocación a tu alrededor? Cuando no se tiene una identidad adecuada, te sientes perdido, inseguro.
Si no sabes quién eres, cómo saber hasta dónde se puede llegar.
Puede que sea una utopía que cuando salgas al exterior y te rodees de personas te sientas cómodo. ¿Qué sucede cuando vuelves a tu interior? Continúas en esa sensación o por el contrario, aparecen nuestros miedos, nuestras inseguridades, el reencuentro con tu yo soy más íntimo y personal, aquellas cosas de la vida que sabes que no están bien y no te gustan.
Hazte esta pregunta: ¿El mundo quiere a la persona o al personaje?
¿Te sientes solo? Aislándote por querer dejar de fingir.
El ser vulnerable con tus emociones y sentimientos nos permiten mostrarnos tal y como somos nada merece más la pena que seamos vulnerable porque esto es la verdadera esencia para ser te hace ser consciente contigo mismo de que no eres perfecto.
A veces, solo se requiere interactuar de otro modo para comprender quienes te quieren verdaderamente tal y como eres. No todo el mundo quiere hablar de temas profundos, inseguridades o complejos personales. Cuando se interactúa e intercambia opiniones con otros, se deja de estar solo. Interactúa con el mundo con los demás contigo mismo y aprende de tus emociones……